A finales de los 80, los diseñadores guardamos las herramientas materiales de dibujo para dejar espacio a la computadora, quien, con su extraordinaria rapidez y calidad técnica, nos seduce y engancha. Desde entonces, sólo usamos un porcentaje mínimo de los ricos programas ofertados, porque la prisa no nos deja espacio libre para investigar o experimentar. Hemos ganado en apariencia, pero estamos perdiendo la riqueza que el gesto manual humano nos aporta para poder renovar el lenguaje de la gráfica contemporánea.
Por ello, este archivo es un medio de inspiración y recreación visual que puede ayudar a liberar y desbloquear rutinas, tópicos y arquetipos visuales, a generar espontaneidad y a despertar la intuición que puede ayudar a renovar el repertorio expresivo que utilizamos actualmente. Su finalidad última es fomentar la comprensión, la valoración y el interés por este género tan visto y a la vez tan desconocido como tal por los profesionales de las artes visuales en particular, y por el público en general.
Ahora propongo una observación atenta, seria y lúdica a la vez, de goce visual y aprendizaje. Os invito a ignorar vuestros propios prejuicios y preferencias subjetivas y a dejaros llevar por las ganas de renovar vuestro propio repertorio.
América Sánchez